Greg Raymer habla sobre el silencio de Full Tilt Poker
¿Por qué ha estado Full Tilt Poker en silencio mientras todos sus jugadores protestaban? Se lo han preguntado muchos y Greg “Fossilman” Raymer, uno de los jugadores más respetados del poker, intenta explicar la estrategia que ha utilizado la sala roja.
El abogado de Missouri (EE. UU.), campeón del Main Event de las World Series of Poker 2004 forma parte de dos de las asociaciones más prestigiosas americanas de poker, el Poker Player Alliance (PPA) y FairPlayUSA. Os recordamos que en estos momentos FairPlayUSA se ha unido a la lucha en Washington D.C por la legalizar el juego online.
“Como abogado entiendo, por una parte, el silencio de Full Tilt Poker, ya que se enfrentan a casos civiles y penales. La situación es muy delicada y la sala necesita mantenerse al margen. Es una actitud negativa, pero está bien hecho en términos de negocios. En este momento tienen otras prioridades”.
Raymer entiende la política que aporta la sala roja.
“Los abogados no quieren correr riesgos con sus clientes. Su trabajo, principalmente, es proteger y valorar los aspectos negativos del caso. No puedes demandar a un abogado porque te aconseje que no hagas declaraciones. Probablemente el silencio es el resultado de lo que otorgaron los abogados a la sala, pero podría haber una razón distinta. Sin embargo, no creo que haya habido un acuerdo entre la sala y el Department of Justice (DOJ) para mantener la confidencialidad y no hacer comentarios en eventos públicos”.
El ex jugador de PokerStars apoya la teoría que han aportado las salas involucradas en el llamado Black Friday.
“Ninguna ley en los EE. UU. es especifica al poker ilegal, por lo que no se debe aplicar la
Unlawful Internet Gambling Enforcement Act (UIGEA), la que solo prohibe transacciones financieras para las salas de poker online. Creo que a día de hoy se sigue pudiendo juzgar la actitud de FTP, pero también hay que tener en cuenta muchas más cosas”.
Además, Raymer ha dejado claro su “separación” con PokerStars diciendo que en enero de este año se acabó su contrato. La sala le ofreció renovarlo, pero las condiciones que ofrecían no estaban en linea con sus expectativas de carrera y por eso decidió no seguir con ellos.
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