Eureka Poker Tour de Praga: Lucas Blanco cae 7.º y Balazs Botond se lleva la victoria
Ayer decíamos que podía ser un gran día, y de hecho lo fue, aunque a nadie se le escapa que los aficionados queríamos más. Sobre todo por que el nivel de juego que ha alcanzado Lucas Blanco le permitía soñar con conseguir una muy buena posición en el Main Event de Eureka Poker Tour. Sin embargo, aunque suene recurrente, todos sabemos como son los torneos de poker. Si cuando llegan esas manos cruciales consigues superar el trámite tienes mucho camino andado, pero si esa mano se nos escapa, las cosas se ponen cuesta arriba. Eso fue justo lo que le pasó al jugador español, tuvo las manos para reventar el Eureka Poker Tour, pero esta vez no cayeron de su lado, aunque seguro que habrá más.
Posición | Jugador | Premio |
---|---|---|
1.º | Balazs Botond | *206.948€ |
2.º | Ayman Zbib | *163.921€ |
3.º | Athanasios Xenodochidis | *186.881€ |
4.º | Jonas Mackoff | 81.100€ |
5.º | Viktor Velikov | 65.440€ |
6.º | Atanas Malinov | 52.050€ |
7.º | Lucas Blanco | 39.500€ |
8.º | Endre Sagstuen | 28.100€ |
El * denota pacto
La jornada comenzaba con 10 jugadores y la mesa final de ocho en el horizonte, algo que no tardó demasiado en llegar. El torneo vivía la eliminación del griego Charmpilas y del local David Novak. Superado ese trámite, las organización repartía los asientos de los jugadores que lucharían por la gloria, entre los que estaba Lucas Blanco.
Una vez formada la mesa final, el torneo tuvo que esperar casi tres horas para vivir una nueva eliminación. Esa fase erosionó mucho los stacks de la mesa, incluido el del seguidor del Atlético de Madrid, que cogía un poco de aire cuando se cargaba al short de la mesa, Endre Sagstuen. El noruego buscaba un respiro intentando llevarse ciegas y antes, pero el español le hacía call con y conseguía dobles en un board que terminaba con las opciones de Sagstuen.
Sin embargo, tras recomponerse un poco con la mano anterior, Lucas se econtraba con el encontronazo que pudo cambiar el sino de su torneo. El español terminaba con sus fichas en el centro con contra las de Athanasios Xenodochidis. Por desgracia, el destino no quiso recompensar el gran juego de Lucas durante los días anteriores. El board traía un que le daba ventaja, pero el resto de calles también traía una sucesión de diamantes que terminaban con la aventura de Lucas en la séptima posición con un premio de 39.500€.
Para nosotros el torneo perdía fuelle, emoción, intensidad. Sin uno de los nuestros ahí arriba se hace mucho más difícil y duro seguir un torneo. Tras la salida de Lucas, y con unos premios que ya empezaban a ser más que considerables, a los jugadores les entró el "frescor". En un abrir y cerrar de ojos, Atanas Malinov, Viktor Velikov y Jonas Mackoff decían adiós a sus opciones de conseguir la victoria.
El torneo se quedaba en el "three handed" con los mejores premios todavía por repartir. Unos premios que lo jugadores prefirieron pactar, restando así mucha emoción al desenlace final.
El siguiente en caer eliminado era Athanasios Xenodochidis, el mismo que se había cargado a nuestro compatriota, y que esta vez probó su propia medicina. El griego se restaba con y recibía el call de Balazs Botond con . Ahí era donde llegaba la carambola. El flop vino seco como la mojama, el turn traía un que daba ventaja al griego que dejaba a su rival con solo 2 outs. Sin embargo, una apareció en el river para sorpresa de los presentes y, por que no decirlo, de propio Botond.
El torneo se quedaba con solo dos jugadores y con una ventaja sustancial a favor de Botond. Su rival no supo, o no pudo, revertir la situación y poco después terminaba en el rail tras no superar el clásico flip, vs .
Balazs Botond, se hacía con la victoria en una jornada en la que los españoles nos quedábamos con la miel en los labios por lo que pudo ser y no fue. Como dice el refranero, "tanto va el cántaro a la fuente...", pues eso, que lo mejor está por llegar.
Foto principal cortesía de PokerStarsblog
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