Las desgracias nunca vienen solas
La historia de Felipe Hernández es de esas que se suelen repetir de forma habitual en los torneos de póker. Llegó a la jornada de hoy con 136.800 puntos, pero durante los primeros niveles de hoy ha sido uno de los jugadores más activos de toda la poker room. Eso le permitió ascender considerablemente, pero el destino le tenía preparada una mala jugada.
Su eliminación comenzó a gestarse en una mano en la que él mismo abría en el botón antes de que Jorge Lisarri le hiciese una three-bet all in por 20 ciegas desde la SB. La grande se tiraba y Hernández pagaba.
Hernández: 
Lisarri: 
Hernández iba por delante y el board flop trajo 
[2], lo que daba algunos outs a su rival. El turn fue un 
que no cambió nada y todo quedó a expensas del river. El dealer quemó carta lentamente y descubrió un 
que hacía saltar por los aires la mano de Hernández y doblaba a su rival.
Aún así, a Hernández le quedaba todavía otro tanto, pero esas fichas rápido se fueron al centro. En este ocasión tenía as-rey y uno de sus rivales no dudaba en pagarle con as-diez. Parecía un gran spot para recuperar lo perdido en la mano anterior, pero la ilusión de doblada pronto se tornó en tragedia cuando un diez apareció en la ventana.
El resto de calles no ayudaron a Hernández y eso le obligó a recoger sus bártulos y abandonar la zona de torneo.
| Jugador | Fichas | Progreso |
|---|---|---|
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Eliminado |