Alderney obligará a sus operadores a tener los fondos de los jugadores en cuentas separadas
Tras la deficiente gestión del “culebrón” de la revocación de la licencia de Full Tilt Poker, la Alderney Gambling Control Commission (AGCC) sigue intentando mejorar su imagen ante la opinión pública del poker. Según informa pokerfuse.com, ahora ha decidido introducir nuevas normas en beneficio de los jugadores, que entrarán en vigor a partir del inicio de 2013. La Comisión va a obligar a las salas de poker online licenciadas por ella a depositar el dinero de sus jugadores en cuentas separadas. Y las salas que no cumplan este requisito perderán su licencia.
La AGCC solo permite una excepción a la regla. En el caso de las salas que no puedan separar el dinero de los jugadores en cuentas aparte, la Comisión se reserva el derecho de eximirlas del cumplimiento de la condición si los operadores le garantizan personalmente que podrán proceder a la devolución del dinero de los jugadores en cualquier momento y coyuntura, y que siempre tendrán en sus cuentas una cantidad de dinero superior a la suma de los depósitos de los jugadores. Así mismo, los operadores de este tipo tendrán que presentar el balance de sus cuentas bancarias e información sobre el dinero depositado en su sala de poker siempre que la AGCC se lo pida.
Tras la puesta en vigor de la nueva norma, todos los operadores estarán obligados a presentar a la Comisión informes mensuales en los que habrán de especificar la suma del dinero depositado por los jugadores en la sala y los balances de las cuentas bancarias de la compañía.
El anuncio de la nueva medida supone una variación importante en la política de Alderney. Anteriormente, siempre había defendido sus métodos de control de los operadores y no se había mostrado favorable de la segregación de los fondos de los jugadores.
Muy probablemente, el citado caso de Full Tilt Poker, su cliente más prestigioso, haya sido la causa principal de este cambio. Os recordamos que FTP utilizaba el dinero de los jugadores para usos propios de la empresa (como el pago de gastos corrientes o, lo que es peor, el reparto de falsos beneficios entre los propietarios).
Pronto conoceremos la reacción de las salas ante la medida de la AGCC. Quizá algunos de sus clientes opten por conseguir licencias de juego otras comisiones más permisivas.
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