Jeffrey Haas apuesta 4.000 en el turn de una mesa que mostraba , lo que lleva a una duda de duración épica por parte de Christoffer Granberg. Haas espera pacientemente a que Grnaberg termine de luchar con los demonios que le susurran "igualar...retirarse...igualar..." y muestra una expresión de serenidad perfecta, casi Zen. Finalmente, Granberg se retira y Haas le muestra sus cartas con deferencia: .