El rincón de Sexton: Archie Karas, Parte 7 — La caída
Todo el mundo ha de superar varios obstáculos en la vida, y la manera de medir el carácter de alguien es viendo como se maneja frente a la adversidad. Archie "el griego" Karas hizo lo que nadie más ha hecho en este planeta, coger 50$ y llegar a los 40.000.000$ jugando a billar, póquer y dados. Archie estuvo en la cumbre del mundo del juego, ¡pero al cabo de dos años lo había perdido todo! La gran pregunta es: ¿Cómo puede alguien llegar a ganar tanto dinero y no ahorrar algo por si las moscas?
Esa es una buena pregunta y, en el artículo de esta semana, hablaremos sobre varios de los errores que cometió Archie, los cuales nunca han salido a la luz. La magnitud de ganar tanto dinero es difícil de imaginar para la mayoría de nosotros. Para que todo el mundo se haga una idea, imaginad que estáis conduciendo de una punta del país a la otra e imaginemos que el viaje durara cuatro días. Lo único que tendrías que hacer durante el viaje es coger una bolsa con 5.000$ en el interior con la mano izquierda y otra bolsa con 5.000$ en la derecha. Tras contemplar esos 10.000$ y pensar en todas las cosas que podrías comprar, tendrías que agarrar ambas bolsas con la mano derecha, bajar la ventanilla con la izquierda y tirar las bolsas al exterior. ¡Tendrías que repetir 1.000 veces el proceso cada día para llegar a los 10.000.000$ y necesitarías tres días más para tirar por la ventana los 40.000.000$!
Desde luego, harías a mucha gente muy feliz en las carreteras y pueblos de tu país, tirando todo ese dinero por la ventana. Archie tiró todo ese dinero, pero la mayoría de sus 40.000.000$ fueron a las arcas del Binion's Horseshoe.
He entrevistado a Archie durante más de 60 horas, he podido cenar con él, he escuchado historias muy interesantes y he tenido la oportunidad de conocer su punto de vista sobre como pudo acumular tanto dinero jugando y los errores que cree que contribuyeron a su bancarrota. Archie Karas es un personaje muy complejo, un intrépido genio del juego, que simplemente no valora el dinero de la misma manera que la mayoría de gente. Si lo hiciera, jamás hubiera ganado tanto dinero. Chip Reese comentó que: "Nunca sabes si Archie lleva 5$ en el bolsillo, 5.000$, 50.000$ o 30.000.000$ en sus cajas fuertes. Siempre está igual. Nada parece molestarle". Doyle Brunson te dirá lo mismo, igual que muchos otros grandes jugadores que han batallado con él. ¡Ninguno de ellos ha visto a alguien como Archie en toda su vida!
Antes de concentrarnos en los errores que cometió, hay que dejar muy claro que no perdió su fortuna jugando al póquer. No hablamos de partidas de mesa larga. Aunque Archie ha ganado mucho dinero en partidas de mesa larga, también ha perdido muchas veces. Lo que él prefiere es jugar heads-up por cantidades astronómicas de dinero. Archie dijo que: "Me encantaba jugar por el límite más alto que fuera posible. Y prefería jugar cara a cara porque se necesita mucha más habilidad. Quería suprimir el factor suerte. La suerte influye más en las partidas de mesa larga, ya que la gente comete errores que te acaban costando dinero".
Archie siguió: "No tienes ni idea por lo que pasé aquellos años. Cuando empezaba un heads-up algunos jugadores se sentaban en la mesa para jugar contra mí. En boxeo o en billar sólo has de enfrentarte a un rival, no a nueve más al mismo tiempo. Si juegas contra una persona tienes el 50% de ganar pero si hay diez jugadores en la mesa tu oportunidad de ganar es tan sólo del 10%. Hace falta mucha más habilidad y agresividad para ganar heads-up. Jugando cara a cara no puedes esperar a que te entren ases o reyes. Pero en mesa larga hay que esperar horas y horas. ¿Y sabes qué? No quiero esperar ni un segundo más. Me encanta que haya acción en cada mano. El boxeo y el billar son juegos de habilidad, igual que el póquer heads-up. ¡Y al final son los jugadores con habilidad los que se llevan el dinero!"
"Cuando tuve todo ese dinero, tenía el poder. Yo ponía las condiciones de los encuentros. Se ponían en fila para jugar contra mí, y siempre tenía que jugar contra los mejores. Era como si yo fuera Fort Knox con todo el oro y ello quisieran arrebatármelo, pero de uno en uno. Alguno consiguió ganarme en una o dos sesiones, pero a largo plazo nadie consiguió derrotarme en aquellos encuentros de heads-up. Todo lo que hicieron fue incrementar mi fortuna. Es divertido, porque algunos de los jugadores más importantes del mundo del póquer presumen de haberme ganado varias veces, pero deberían refrescar su memoria un poco. Es posible que ganaran jugando en mesa larga y que yo perdiera en esa sesión, pero jugando heads-up no hubo nadie que consiguiera doblegarme. ¡Una partida en mesa larga no tiene nada que ver con una partida cara a cara!"
En este punto de la conversación le pregunté a Archie si todos aquellos grandes jugadores de póquer dejaron de jugar contra él en algún momento.
Archie respondió: "Sí, y esa es la razón de que comenzara a jugar más a los dados y al bacarrá. Llegué a jugar y derrotar a los mejores jugadores, incluyendo a Chip Reese, con el cual llegué a jugar 25 encuentros. Enseguida corrió la voz sobre lo difícil que era ganarme, así que al cabo de un tiempo ya nadie quería jugar contra mí. Tuve que empezar a jugar a los dados y acabé transformando mi banca de 17.000.000$ en 40.000.000$".
Le dije: "Archie todos sabemos lo que hiciste, y que no existe ninguna otra historia igual en Las Vegas como la de llegar con 50$ y transformarlos en cuarenta millones. Conseguiste que Jack Binion y el Horseshoe incrementaran por quince los límites máximos de apuesta, ¡de los 20.000$ a los 300.000$ por apuesta! Sólo eso ya es todo un record en mi opinión. No he escuchado ninguna otra historia ni he leído nada que pueda superarlo. Entonces, ¿Cuáles crees que fueron tus mayores errores para terminar en la bancarrota?"
Tras preguntárselo Archie se quedó mirándome un rato sin decir una palabra. Entonces reaccionó: "Tom, nunca he hablado con esto es detalle en todos estos años. Yo soy es único culpable de haber perdido todo ese dinero, no Jack Binion ni el Binion's Horseshoe".
"Me lo tomé con filosofía, algo que aprendí de otro jugador llamado Jack Perkins: 'Si eres un primo, al menos cállate para que nadie se dé cuenta'. Perdí pero lo acepté como un hombre. He estado jugando desde los 17 años y he ganado y perdido un millón de dólares como 50 veces en mi vida. Pero he de admitir que perder 40.000.000$ fue algo muy duro para mí. He pensado varias veces sobre eso, así que déjame enumerarte cuales creo que fueron mis errores.
"El primero: obviamente, no saber retirarme en algún momento. Pero hay que ser jugador para entender lo difícil que puede ser. Una vez le dije a Jack: 'Algunos amigos me han comentado que estás pensando en retirarte, ¿es eso cierto Jack?' Él respondió: 'todavía no, todavía no' y me aseguró que era sólo un burdo rumor. Jack era un tipo inteligente, porque si hubiera respondido otra cosa probablemente hubiera sido yo el que me hubiera retirado primero. Siempre quise jugar más fuerte. Quería jugar a los dados sin límite, para poder hacer apuestas de 500.000$, y lo hubiera apostado todo, de 1.000.000$ a 10.000.000$ en la línea de pase, si me lo hubieran permitido. Recuerdo a Jack Binion sentado en la mesa de su despacho diciéndome: 'Archie, hago todo lo que puedo', y se iba quedando sin habla, como si no pudiera casi respirar".
"El segundo: si hubiera sabido que el boom del póquer estaba a la vuelta de la esquina, me hubiera guardado 10.000.000$ para poder jugar, aunque hubiera tenido que esperar diez años. El póquer siempre ha sido mi especialidad, ¿pero quién iba a imaginar entre el 92 y el 95 que habría tal boom por el póquer en 2003? En aquellos tiempos no podía esperar ni tres horas para entrar en acción. Por eso jugaba a los dados, porque podía ganar o perder un millón en sólo una tirada".
"El tercero: guardar tanto dinero en las cajas fuertes del Horseshoe fue un gran error. El impulso por jugárselo era demasiado fuerte. Durante aquellos dos años y medio de juego sin parar hubo un periodo de tres semanas donde perdí 30.000.000$ que no debería haber perdido jamás. Lo que pasó es que perdí 11.000.000$ es una noche jugando a los dados. Fue la noche en que tuvieron que perforar las cajas fuertes para que pudiera seguir jugando, ya que me había olvidado de traer las llaves. Perdí 2.000.000$ y tuve el impulso irresistible de seguir jugando. Estuve muy enfadado aquella noche, no tanto por haber perdido, sino porque debería haberme retirado tras perder aquellos 2.000.000$ y no seguir jugando. Tras la desastrosa sesión de dados me puse a jugar a bacarrá y conseguí que Jack subiera el límite de la mesa a 300.000$ por apuesta, y no tardé en perder unos cuantos millones más. En medio de todo esto jugué un heads-up de póquer contra Chip Reese y acabé perdiendo 2.000.000$ contra él. No tenía la cabeza para póquer esa noche, ya que mi cabeza le seguía dando vueltas a como había perdido todos esos millones jugando a los dados y al bacarrá. Lo que te estoy explicando es el punto clave de mi caida en picado, ya que volví de nuevo a las mesas de bacarrá y en unos diez días había perdido 17.000.000$. En tres semanas había perdido once millones en el póquer, diecisiete millones en el bacarrá y once millones en los dados, ¡lo que sumaban 30.000.000$! Tras aquel desastre me tomé un par de meses de vacaciones para ir a casa, a Grecia. Todavía tenía unos 12.000.000$ en el banco, y necesitaba un descanso".
"El cuarto: el error más grande que cometí fue no presionar a Jack para que me diera mejores odds cuando estuve jugando a 300.000$ por apuesta. Cuando estuve ganando hubiera ganado unos 80.000.000$ y quizás entonces me hubiera retirado. Creo que hubiera guardado de veinte a cuarenta millones, ya que todavía me quedaba una buena banca para seguir jugando. Un día le dije a Jack que iba a retirar todo el dinero para invertirlo y ni parpadeó cuando escuchó la noticia. Comentó: 'Eso estaría bien, Archie, así podríamos ganarte más dinero aún' No me tragué su farol, ya que Jack sólo pensaba en el dinero. No me pasaba por la cabeza el invertir y tener que reducir mi banca para jugar, y Jack lo sabía perfectamente. Cuando tenía el dinero tenía el poder. Le podría haber sacado unas odds mejores, que me diera 2 a 1 cuando apostaba 300.000$. Para mí, ese fue el error más grande que cometí".
Entonces le dije: "Archie, dices que todavía te quedaban 12.000.000$ tras aquella mala racha. ¿Qué sucedió cuando volviste de Grecia? ¿Te acuerdas de que pasó hasta que te quedaste con tu último millón?"
"Bueno, seguí donde lo había dejado, jugando a los dados y al bacarrá por 300.000$ la apuesta, y en menos de un mes ya sólo me quedaba un millón", contestó Archie.
¿Y qué hiciste con tu último millón?
"Quise intentar doblarme, así que fui al Bycicle Club de Los Angeles con mi último millón en una bolsa y jugué un heads-up contra Johnny Chan, que estaba bancado por Lyle Berman. De hecho cada dos horas se intercambiaban, lo cual ya me iba bien, ya que Johnny era mucho más duro. Todavía recuerdo llevar mi último millón a la mesa, abrir la bolsa para demostrar que no estaba en la bancarrota y colocarlo sobre la mesa, ¡para jugar una partida por todo lo que tenía!"
Sacudí mi cabeza al escuchar eso y le dije, "Archie, me dejas totalmente atónito. ¡De todos los lugares donde jugarte tu último millón escoges jugártelo contra una leyenda viviente como Johnny Chan! No sé si nadie tendría el coraje suficiente como para hacer eso. ¿Perdiste todo? ¿Esa es la manera en que perdiste hasta tu último dólar?
Archie sonrió y contestó: "No, aquella noche me doblé. Ya te he dicho que nadie podía ganarme en un heads-up. Perdí a todos mis clientes en el póquer, ya que se dieron cuenta de que nadie podía batirme cara a cara. Creo que a día de hoy Johnny y Lyle tienen 15 brazaletes de las WSOP entre los dos. Yo no tengo ninguno. Siempre he sido el rey de los heads-up, pero un rey sin corona. Si dieran brazaletes de heads-up ya tendría 80. Bueno, tras doblarme no tardé demasiado en perderlo jugando a los dados y al bacarrá en límites altos. Esta es la historia verídica de como llegué a Las Vegas con 50$ y gané 40.000.000$ sólo para volver a perderlo todo de nuevo. Mucha gente cree que el mayor misterio es como pude durar tanto, jugando tan fuerte durante dos años. ¡Debí de jugar como 2.000.000.000$ durante toda ese periodo!"
No te pierdas la octava parte, te sorprenderás cuando veas lo que hizo Archie al cabo de cuatro meses de perder toda su fortuna. La mayoría de gente se vendría abajo, como si les hubiera pasado un tren por encima, si pasaran por lo que pasó Archie. ¡Pero Archie no está hecho de la misma pasta que la mayoría de gente!