Reporte del EPT Barcelona
Mi primera "caja" en un EPT!! No es gran cosa, cobré poco más que la entrada del torneo y un puesto 39, no es para celebrarlo ni nada por el estilo. Estaba un poco decepcionada cuando salí (la sensación de tener 180.000 puntos en un EPT no es algo que quieras abandonar fácilmente...) pero ahora sin adrenalina y viendo todo lo que he aprendido este fin de semana, estoy francamente contenta.
El famoso dicho de "si no sabes quién es el pardillo de la mesa, es que el pardillo eres tú" cobra un duro realismo en el contexto de un EPT con los mejores jugadores del mundo y siempre le había tenido "miedo" a estos torneos tan grandes. Pero al fin pude llegar a jugar en una fase más o menos late, cuando las mesas se van poniendo cada vez más difíciles y los jugadores no paran de hacer filigranas y fue como ver la luz al final del túnel... He aprendido mucho este fin de semana (entre las horas de juego y las conversaciones post-torneo -mil gracias!-) y estoy deseando ponerme a practicar algunas cosillas.
El primer día empezó muy bien para mí. En el nivel 3 había triplicado mi stack y estaba muy, pero que muy, cómoda en mi mesa. Dos de los mejores jugadores habían caído eliminados y el otro jugador que me parecía peligroso le tenía algo de respeto a mi stack, así que se me estaba dando bien. En el descanso comenté con uno de los chicos de Everest Poker que yo tenía mucho peligro con un stack como ése y que no iba a tardar demasiado en pegármela. Dicho y hecho, en el nivel 4 me metí en un lío con AQ, haciendo un call sin posición a un bote que había sido subido 2 veces. Podría considerarse un primer error el jugar AQ en esta situación. Tengo stack suficiente (ese suele ser el principio de mis males) para pagar la apuesta de 2500 puntos, aunque quizás no sea la mejor mano contra el rango de manos del segundo raiser.... Pago pensando que si sale un as tendré que andarme con mucho cuidado, pero el caso es que el segundo raiser es bastante weak (pero también muy tight) así que decido pagar porque siempre tendré la opción de tirarle del bote si veo que no le gusta el flop... También puede decirse que, ya de decidir jugar esa mano, debería haber resubido para tirar al primer raiser, pero no quería invertir tanto dinero en una mano que sé débil (además, creo que ese jugador se tirará de todas formas, y así sucede). El caso es que sale un flop con dos tréboles, el mismo palo que mi AQ. Paso, y mi rival apuesta casi el bote, jugando la mitad de su stack (yo tengo unas 27000 fichas, y él unas 10.000). Me tienta mucho, sobre todo sabiendo que él lleva buena mano y que si sale mi color conseguiré su caja entera, quiero pagar, pero me doy cuenta de que si sólo hago call, y en el turn no sale un trébol, él me va a apostar su resto y voy a tener que pagar por lo rentable del bote, así que decido intentar llevarme el bote con un semifarol dejándome la puerta abierta del proyecto de color. Le meto all-in y él paga, mostrando ases. No sale ningún trébol y bajo a los 18.000 puntos, aún por encima de la media, pero algo tocada anímicamente por perder tantas fichas.
Me cambian de mesa y es el principio del fin. En la otra mesa estaba jugando muy agresiva con consentimiento implícito de mis rivales, pero en la nueva mesa hay un par de bigstacks importantes, y tras una jugada muy comprometida mía, donde pago con un 47off a un proyecto de escalera completamente fuera de odds (es una jugada muy rara -mala- y no hay demasiada explicación válida...) y después de que me salga no sólo la escalera sino también un color runner runner con mi 7, el resto de la mesa me declara "donante de honor" y empiezan a plantar cara a todos mis raises y a minar aún más mi stack. Me trastorno del todo y sigo regalando fichas con jugadas más que dudosas. Me encuentro al final del día 1 con un stack de 13000 puntos... y bajando. A pesar de los consejos de Luis Sevilla que me dice que debo arriesgarme e intentar robar algún bote (y que soy una supertight... juas!) /b]decido que locuras ya he hecho suficientes y que mi castigo será empezar el día 2 shortstack, así que no me muevo en lo que queda de nivel y finalmente paso muy corta, con 13.400 puntos[/B].
El día 2 me toca en una mesa con Ramzi Jelassi, del que mi hermano me previene que es un gran jugador (aunque si no recuerdo mal ya coincidí brevemente con él en las WSOP de Londres). Me doblo después de que se abran los cielos para dejar caer un 10 en el turn cuando estaba all-in con 10J contra AJ de mi rival. Cojo vida y empiezo a robar tímidamente alguna ciega y me llevo también algún bote sin resistencia ni showdown. Me entra KK justo cuando uno de los jugadores intenta tirarme de un bote preflop (me mueve all-in y hago instacall, mis reyes ganan a sus dieces) me llevo por delante al pobre Aniol, yo con JJ y él con AQ (después de que perdiera casi todo su stack con muy mala suerte, perdiendo todos los flip que jugó) y me igualo en fichas a Ramsi Jelassi (nos intercambiamos las fichas, él me roba todas mis ciegas y yo recupero alguna de mis fichas resubiendo algunos botes que él intenta robar). Me fijo mucho en él y en cómo juega, me encanta. Tiene un estilo muy agresivo, pero es prudente, sabe identificar situaciones de riesgo y retirarse a tiempo pero tampoco duda en jugarse toda su caja de farol en el river en múltiples ocasiones.
Me vuelven a cambiar de mesa en el momento más álgido y me llevan a la izquierda de Jonas Klausen. Yo tengo un stack jugoso, de unos 120.000 puntos, muy por encima de la media, pero el de él deja en ridículo al mío, con más de 240.000. No estuve demasiado tiempo en esa mesa, porque enseguida se rompió la burbuja. Tuve alguna mano bonita con Klausen y conseguí incrementar mi stack a los 180.000. Nos cambian a todos de mesa y me envían a una completamente infestada de tiburones. Entre otros, me previene mi hermano, está el belga Kitai al que él considera uno de los mejores jugadores del circuito... Pablo "morpheo" Ubierna me indica también que es un jugador muy sólido y peligrosísimo y a pesar de todo me meto en líos con él nada más llegar, cuando aún no había acabado casi de ordenar mi stack... él sube desde UTG y yo resubo desde middle con 77. Él paga y el flop sale 653 con dos diamantes. Él hace una continue, que para el bote que se ha formado ya, es más que jugosa, y yo decido hacer un miniraise, arriesgando casi un tercio de mi stack (qué idiota soy, haciendo miniraise ahí... es para matarme...)... evidentemente, el mueve la caja después de hacer un poquito de paripé del tipo "espera-que-miro-mis-cartas-a-ver-si-tengo-diamantes". Tenia que haber pasado o mover all-in y no esa apuesta ridícula... no me siento a gusto con mi overpair de sietes, a pesar de tener también la gutshot, y al final decido tirarme (cuando acabó el torneo me dijo que llevaba set de cincos, pero quizás me dijo sólo lo que quería oir...). Me quedo con la media, unos 115.000 puntos. Pero las ciegas aprietan y muy pronto bajo a 90.000.
A falta de 15 minutos para acabar el día 2 llega la mano fatídica. Un jugador recién llegado hace un raise a 15.000. Kirai, a su izquierda, hace call, Jonas Klausen (que también acaba de incorporarse a esta nueva mesa mía) hace call también, y yo en la ciega pequeña pienso que, aunque sería arriesgado con tres jugadores en el bote, es el momento perfecto para mover all-in. Hay un bote de más de 50.000 puntos!! Cuál es mi grata sorpresa cuando además me veo JJ. Dí un respingo y todo. Muevo mis 90.000 para el centro, el primer jugador se tira después de mucho pensar, pero Kitai mueve all-in inmediatamente después. Klausen se retira y me deja a solas con mis jotas contra los ases de Kitai. No sale la jota milagrosa (mi 10 del inicio del día ya cubrió mi cupo de suckouts del día) y quedo fuera del torneo. Es una jugada inevitable, y al menos me consuelo con que no he caído con mala suerte o, peor aún, por un error mío (lo de los sietes es un error, vale, pero me quedaron fichas de sobra con las que podría haberme recuperado...).
En fin, lo dicho, que he aprendido muchísimo de los rivales que tuve en las mesas y de los compañeros fuera de ellas, que me lo he pasado genial esta semana... espero perderle el miedo a estos torneos y que esta sea la primera de muchas cajas internacionales...
May Maceiras es jugadora del Equipo Everest. Puedes jugar con ella en Everest Poker