La mano que nunca olvidaré: La 'Magia Blanca' de Hellmuth en el Main Event de las WSOP Europa
Se trata de esa mano que te lleva a la cima o te entierra definitivamente. Ese flop soñado o ese river odiado. Todo el mundo tiene una, no importa cuántos torneos haya jugado o cuan experto sea en la materia. En PokerNews queremos echar un vistazo justo a esas manos. Esas que permanecen con el paso del tiempo. Esas que, dependiendo del resultado, te llevan a la gloria o a la miseria.
Para esta edición, hemos hablado con Phil Hellmuth sobre una mano memorable.
10.450 € Main Event de las World Series of Poker Europa 2012
El 2012 fue un año espectacular para Phil Hellmuth. Durante el verano logró su brazalete número 12 en Las Vegas en el $2.500 Seven-Card Razz, en el que ganó 182.793 $. Eso le permitió librarse de algunas críticas ganando su primer brazalete en un evento que no era de hold'em (posteriormente ganaría el $10.000 Seven-Card Razz en 2015), y no dudó en cruzar el charco para participar en las WSOP-Europa 2012, que ese año se disputaron en Francia.
Tras sobrevivir a un field de 417 entradas, Hellmuth alcanzó el four-handed junto a Stephane Albertini, el californiano Joseph Cheong, y el ucraniano Sergei Baranov, que solo unos días antes, siempre según Phil Hellmuth, había predicho que dos jugadores terminarían jugando el heads-up por el título.
Fue ahí cuando llegó una mano clave que impulsaría a Hellmuth al título (resultado que también pronosticó Baranov). Las ciegas estaban en 25.000/50.000 y ante de 5.000. Cheong foldeaba en under the gun y Albertini subía a 100.000 en el botón. Baranov hacía entonces una three-bet a 200.000 desde la ciega pequeña. Hellmuth pagaba en la ciega grande y Albertini también pagaba.
El flop traía y Baranov disparaba 275.000 puntos. Hellmuth pagaba de nuevo y Albertini se tiraba. El turn era una . Baranov apostaba 500.000 puntos y Hellmuth volvía a pagar a la velocidad del rayo.
El river era un y el ucraniano no cesó en su agresión. Esta ve fue 1 millón de puntos, lo que dejaba una dura decisión a Hellmuth, que se ponía a pensar.
"En la cabina de comentaristas Antonio Esfandiari pensaba que Sergei lo tenía."
"¿Tuviste suerte otra vez?" decía Hellmuth a Baranov. "Eso o estás tratando de farolear por todo tu dinero otra vez. Esto es muy sick. ¿Jotas es bueno? ¿Sergei? ¿Puedes superar a dos jotas?".
Con un poco más de 4 millones de fichas en ese momento, perder la mano podría supondría perder gran parte de su stack. Además, con el título de las WSOP Europa a la vista, la mano era una de las más importantes de todo el torneo para el 14 veces ganador de un brazalete de las WSOP. No era su primer enfrentamiento, los dos habían chocado ya otros botes grandes.
"Llegados a ese punto solo podía superar a un farol absoluto," decía Hellmuth. "Reflexioné y consideré tirarme. Si pagaba y estaba equivocado entonces me convertía en el short-stack. Si me tiraba, entonces aún tenía opciones de recuperarme y ganar. Un call era arriesgado porque si estaba equivocado bajaría hasta el cuarto lugar y es muy probable que Sergei me derrotase. Subió antes del flop y apostó mucho en cada calle. Es raro que alguien dispare cuatro calles sin nada. Hasta Antonio Esfandiari, en la cabina de comentaristas, pensaba que Sergei lo tenía."
After studying his opponent and considering his options, Hellmuth's instincts proved to be in top form.
"Después de cuatro minutos me decidí por hacer call", decía. "Sergei me dijo, 'tú ganas', y yo di la vuelta a mis cartas () boca arriba y grité: '¡Sí!', ahora tenía el liderato en fichas y mi objetivo era ganarlo. La verdad es que jugué uno de los mejores torneos de mi vida, y de hecho lo gané. En mi profesión eso no siempre sucede."
Hellmuth recuerda también otra mano importante anterior, cuando un jugador en el botón subía y el solo pagaba con en la ciega grande. Aunque Hellmuth no recordó exactamente los detalles, si recordaba que el flop fue . Su rival tenía y él fue capaz de tirarse después de que su oponente hiciese una apuesta de continuación.
Hellmuth terminó ganando el titulo y el brazalete 13 de sus 14. Se llevó un premio de 1.022.376 € y un gran prestigio al convertirse en el primer jugador en ganar el Main Event en Las Vegas y en Europa.
"¡Fue una gran victoria para mi carrera!", decía Hellmuth. "Primero gané mi primer brazalete de las WSOP en un evento que no era de Hold'em y fue algo enorme. Respaldar eso con uno de los brazaletes más prestigiosos, el de las WSOPE, ¡fue increíble! Después de tres runner-ups en las WSOPE 2011, conseguir dos victoria fue una manera de decirle al mundo que no solo no estaba acado, sino que era el jugador más brillante del planeta en 2011-2012".