Con el último cambio de nivel, el sexto del día, nos acercamos al descanso. Más de 30 jugadores han dicho adiós de forma irreversible al torneo, mientras 22 jugadores continúan en la liza por una plaza en el evento de mayor entrada de cuantos componen el calendario del PSF Marbella.
En estos momentos están en la burbuja de premios, pero no de entradas. El vigésimo primer puesto recibirá 600 € en metálico, un triste consuelo para los que buscaban un puesto en el evento de 2.200 €. Tras casi ocho horas de clasificatorio, el único premio válido es una asiento; y todo apunta a que no conoceremos a sus propietarios hasta después del segundo descanso del HR.
Con Fernández esperando en la ciega grande, y después de que HJ, CO y botón completasen, nos encontramos con una resubida desde la ciega pequeña a 4.500 puntos, en un punto que parecía interesante para el squeeze. Oriol no dudó en pagar; de hecho, esta apuesta solo logró disuadir al CO.
Ya con sobre el tapete, la familia al completo decidió buscar una carta gratis en el turn, que dejó un . A Oriol le volvió a llegar la mano sin acción y esta vez no la dejó pasar: empujó 9.000 puntos al centro, apuesta que le dejó a solas con el ocupante del hijack, Yann Chong, único interesado en seguir en la mano.
El river nos trajo un y, con él, una apuesta de 24.500 puntos desde la banda de Fernández; su rival se tomó un rato antes de tomar la decisión de abandonar la mano. Oriol, cortés, agradeció el bote mostrándole una de sus cartas, que "casualmente" resultó ser un .
Alcanzado el final del nivel 6 del día 1 en este High Roller del PSF Marbella, llega el momento de hacer un pausa para recuperar fuerzas con la cena. Y sí, el clasificatorio todavía sigue en marcha, a falta de un eliminado para descubrir a los felices ganadores de una entrada de 2.200 €.
Mano durísima para el español, que vio desaparecer la última de sus fichas en una mano muy extraña.
Cuatro jugadores completaron la ciega antes del flop. Tras aparecer en el flop, Ozimek se propuso aligerar la compañía con una apuesta de 1.200 puntos, suficiente para que la ciega pequeña se tirase, pero no para disuadir a Salazar o a María del Rosario Velázquez.
El turn dejó un y una secuencia de apuestas similar a la ronda anterior; check hasta Ozimek, que ataca con 5.000 puntos para volver a descartar a otro jugador, en este caso, a María del Rosario. José y Michal se quedaban solos. Con el del river, escuchamos un nuevo “paso” desde el asiento de Salazar, pero Ozimek no quiso aminorar el ritmo y lanzó la tercera bala, por el resto del español. Este aceptó convencido, pero tras ver el en la mano de su rival, que había completado una escalera, se despidió de sus dobles de damas-jotas, de la mesa y del high roller.
El marcador anuncia que el próximo nivel será el último en el que los jugadores puedan ejercer su derecho a reentrada, y también supondrá el cierre del registro tardío. En estos momentos, y tras la incorporación de los 20 clasificados el maratoniano torneo de la tarde, el número de entradas se sitúa en las 166.
Con el cambio al nivel ocho tampoco parece haber variado la aparente tranquilidad con la que los jugadores han vuelto de la cena. En casi una hora de juego solo se ha producido una eliminación, con lo que nos quedamos con 126 supervivientes.
Miklos sube desde posiciones medias a 1.800 puntos, y solo recibe respuesta por parte del CO. Con en el flop, repite cuantía, y su rival, acción. El turn les trae un , y Zsuffa eleva el requisito hasta los 3.600, pero vuelve a recibir el call. Con la del river ambos deciden no insistir en las apuestas.
Zsuffa ya ha perdido toda esperanza y prefiere no compartir la información sobre su juego que podrían aportar su mano, y entrega el bote.
Josef Kurt ya había gastado su oportunidad de recompra y se encontraba frente a la difícil decisión de pagar 26.300 puntos, el resto de Vincent Chrisphe, frente a un flop .
Para llegar hasta esta situación, antes se habían quedado solos preflop, para lo que bastó una subida estándar. Ya con las tres primeras comunitarias frente a él, Josef subió hasta 10.900 el ataque original de Vincent, momento en que este respondió con la caja.
Tras un par de minutos, en los que se puso fin al nivel 8, Kurt se decidió por la prudencia: fold.
sobre el tapete, la familia al completo decidió buscar una carta gratis en el turn, que dejó un 
. A Oriol le volvió a llegar la mano sin acción y esta vez no la dejó pasar: empujó 9.000 puntos al centro, apuesta que le dejó a solas con el ocupante del hijack, Yann Chong, único interesado en seguir en la mano.
y, con él, una apuesta de 24.500 puntos desde la banda de Fernández; su rival se tomó un rato antes de tomar la decisión de abandonar la mano. Oriol, cortés, agradeció el bote mostrándole una de sus cartas, que "casualmente" resultó ser un 
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en el flop, Ozimek se propuso aligerar la compañía con una apuesta de 1.200 puntos, suficiente para que la ciega pequeña se tirase, pero no para disuadir a Salazar o a María del Rosario Velázquez. 
y una secuencia de apuestas similar a la ronda anterior; check hasta Ozimek, que ataca con 5.000 puntos para volver a descartar a otro jugador, en este caso, a María del Rosario. José y Michal se quedaban solos. Con el 
en la mano de su rival, que había completado una escalera, se despidió de sus dobles de damas-jotas, de la mesa y del high roller.
en el flop, repite cuantía, y su rival, acción. El turn les trae un 
, y Zsuffa eleva el requisito hasta los 3.600, pero vuelve a recibir el call. Con la 
del river ambos deciden no insistir en las apuestas. 
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