Abría la acción un jugador en el cutoff y recibía el call de la ciega pequeña y de Jaime Rueda en la ciega grande. Con los tres en la mano, el croupier descubría un flop .
La ciega pequeña pasaba y Jaime hacía lo mismo, aunque este pagaba la apuesta de continuación de 5.000 puntos del cutoff.
El turn era un y los dos decidían pasar antes de que un se descubriese en el river. Jaime volvía a pasar y su rival tampoco metía ni una ficha.
El cántabro mostraba seises y eso era suficiente para superar a los cuatros de su rival.
En lo que llevamos de jornada, un total de 253 jugadores se han visto obligados a dejar su asiento libre y coger el camino del rail.
Eso ha dejado a 260 jugadores sentados todavía en las mesas, pero todavía tendrán que pelear duro ya que queda mucha jornada por delante, concretamente algo más e tres niveles.
No hace mucho que contábamos la historia de Lluis Subirós y su intento por remontar una situación que durante los primeros niveles llegó a ser crítica.
Pues bien, ahora mismo estamos en disposición de anunciar que Subirós ha consumado esa remontada. Hace solo unos segundos pasábamos por su mesa y lo encontrábamos apilando un stack de unos 125.000 puntos.
Su última mano, la que le permitía llevarse ese bote, la ganaba tras apostar 8.500 puntos en el turn de un board . Petru Tarlev le pagaba en el botón y un jugador hacía lo mismo en la ciega grande.
El river traía una y el jugador en la ciega salía liderando la acción con una apuesta de 13.000 puntos. Subirós no pensaba demasiado y hacía call antes de que Tarlev se rindiese. El jugador en la BB muckeaba directamente y Subirós se hacía con otro buen bote.
Un pelón frustrado por su situación en los últimos niveles, Jose Bordas se restaba preflop con 108 suited y recibía el call de un rival con JJ.
El flop traía J9Q con dos cartas del palo de Josito, que ya tenía la escalera asegurada. Sin embargo, el turn era otra dama que daba full a su rival y le dejaba con solo unos outs para poder ganar la mano.
La sorpresa llegaba en el river, ya que Bordas conseguía completar escalera de color para destrozar la mano de su rival y subir hasta los 70.000 puntos.