Estrategia del póquer: apostar en el turn.
Estás en la ciega grande y pagas una subida con . El flop es y tu rival hace una fuerte apuesta. No estás seguro de si tu oponente va por delante, y si es así, probablemente tienes 2 ochos y 3 sietes como outs y un proyecto de color runner-runner, así que decides especular y pagar su apuesta. El turn es un precioso que te da trío. En el bote hay 2.000 puntos, tú tienes 6.000 en tu stack y tu rival te cubre. ¿Qué debes hacer para intentar que todas vuestras fichas vayan al centro de la mesa?
Muchos jugadores juegan mal este tipo de manos. La mayoría saben apostar manos más estándar, pero hacen aguas cuando en turn cambia la mano tan bruscamente.
En esta mano asumiremos que el turn nos ha puesto por delante. No hay tantas fichas en juego como para que podamos considerar tirarnos, así que vamos a jugar la mano estrictamente por valor.
Diferentes tipos de rival
La acción a desarrollar en el turn depende por supuesto del tipo de rival que tenemos delante:
Si tu rival es muy agresivo, y lo suficientemente loose como para sobrevalorar sus manos, es probable que pasar sea al movimiento correcto. Quizás sobrevalore manos como KQ o incluso JJ y él mismo se ahorque con una apuesta. Su agresividad incluso le puede llevar a apostar de nuevo un proyecto, y en tal caso podríamos rebotar e ir all in. Quizás sea tan agresivo como para farolear de nuevo en el turn, y sacaríamos más valor que apostando de cara.
Sin embargo la mayoría de rivales que vas a encontrar probablemente serán buenos, estándares. Un rival estándar hace muchas apuestas de continuación en la mayoría de flops, pero difícilmente sigue pegando en el turn. Seguro que apuesta sus proyectos en el flop, pero sabe que si el turn empareja la mesa echará el freno. Sabe que la mesa es inofensiva en caso de que llevemos una dama o un ocho y seguro que pasará para coger una carta gratis. Un rival estándar bueno puede incluso pasar con una mano como KQ o ases, hacer check para controlar el bote y prevenir el peligro de que tengamos una mano muy fuerte.
En definitiva, el rival estándar bueno nos dará muy pocas alegrías si pasamos. Cuando ligas trío con la segunda pareja de mesa, la mano no está lo demasiado oculta como para pasar.
No obstante hay una opción más atractiva, hacer una [B]fuerte apuesta[B]. Una apuesta grande será muy sospechosa a los ojos de tu rival. No cometas el error de hacer una apuesta de medio bote, ya que tu rival podría darse cuenta de que quieres sacarle valor a tu mano. Vamos a considerar que manos puede tener tu rival para ver porque una apuesta de 2.000(el tamaño del bote) es el mejor movimiento:
[B]Nuestro rival lleva AQ, KQ, AA o KK[/B]
Esta es la mejor situación en que podemos encontrarnos. Considera la mano desde el punto de vista de tu rival, es muy difícil tirarse en el turn con alguna de esas manos. Parece como si quisiéramos utilizar ese segundo ocho para asustar, y nuestro rival seguramente creerá que su mano es buena todavía. Si piensa eso, probablemente vaya all in para "proteger" su mano y habremos conseguido nuestro objetivo.
[B]Nuestro rival lleva JJ, 1010 o 99[/B]
En este caso nuestro rival puede encontrar una excusa para tirarse, pero tampoco sería fácil. Alguno rivales creerán que estamos faroleando e intentaran tirarnos yendo all in. Esto sería todo un éxito, ¡ya que de ninguna otra forma podríamos sacarle todas las fichas a dos nueves!
[B]Nuestro rival tiene un proyecto de escalera o de color en el flop[/B]
Esta es la situación en que pasar sería un claro error, ya que invitaría a nuestro rival a coger la carta gratis. Una apuesta fuerte no nos hará ganar un gran bote contra este tipo de mano, pero es la mejor manera de protegerse contra ellas. Nuestro rival no tiene odds para pagar, así que nos beneficiamos en los dos casos, tanto si se tira como si paga.
[B]Cambiemos las tornas[/B]
¿Qué nos enseña esta mano acerca de lo que deberíamos hacer en la situación opuesta? Vamos a considerar la misma mesa y preguntarnos que deberíamos hacer con un proyecto como o .
La lógica se invierte, así que lo [B]peor[/B] que podríamos hacer es una apuesta grande. Hemos llegado a la conclusión de que tu rival probablemente no se crea ese tipo de apuesta, así que hemos de encontrar un patrón de apuestas más convincente.
Es probable que lo mejor sea [B]pasar[/B]. Lo ideal es que nuestro rival vuelva a apostar para hacer un check-raise. Ese es el tipo de movimiento que la mayoría de nuestros rivales creen que haríamos si el turn hubiera mejorado nuestra mano o si ya en el flop hubiésemos ligado un trío. Es un movimiento que nos hará ganar muchas fichas si conseguimos tirar a nuestro rival, pero es muy arriesgado.
Para hacer este movimiento debes estar seguro que tu rival es lo suficientemente "[B]bueno[/B]" como para entender la situación y deducir (incorrectamente) que tu mano es muy fuerte. A veces no es suficiente convencer a tu rival, ya que algunos sienten que no se pueden tirar de su mano una vez han metido muchas fichas en el centro de la mesa. Pero si tienes al rival adecuado, el check-raise puede ser un arma muy poderosa.
Otra idea es pegar una pequeña apuesta de cara. Quizás la mitad del bote, como si quisieras que te pagaran. Normalmente los rivales pagan una vez pero no dos, por lo tanto, has de estar preparado para volver a farolear en el river. Algunos jugadores se frenan si les pagan y no se atreven a seguir con el farol. Analiza bien la carta del river, si asusta o ayuda a tu rival y haz una apuesta lo suficientemente grande como para que moleste a tu rival, pero con cuidado de no hacer una apuesta tan grande que sospeche que es un farol.